Mi otra yo: la serie estrella de Netflix que da visibilidad a las constelaciones familiares
Mi opinión como Consteladora sobre la serie espirituale de Netflix
En los últimos años, las llamadas terapias alternativas, complementarias u holísticas están en auge y son cada vez más accesibles al público en general. Entre ellas se encuentran las constelaciones familiares sistémicas y las terapias transgeneracionales. Este tipo de ayuda se basa en el principio de que los traumas, experiencias y emociones de nuestros antepasados repercuten en nosotros, llegando a crear nuestro destino de forma totalmente inconsciente. Todos pertenecemos a un sistema familiar, a un clan que vive dentro de nosotros y a través de nosotros. Si en algún lugar se ha interrumpido el flujo de Amor entre sus miembros, los descendientes tienen posibilidades (puertas epigenéticas) de desarrollar síntomas para que esto pueda reconocerse y repararse. Trastornos, adicciones, enfermedades, patrones repetitivos, accidentes… Todos ellos pueden ser la materialización de un dolor en el sistema, de un desequilibrio, transmitido de generación en generación. Aquí echaremos un vistazo entre bastidores a la serie de Netflix Mi otra yo: ¿ficción o realidad?
Si es la primera vez que oyes hablar de este tipo de terapia, lee este artículo antes de continuar: Constelaciones familiares: un viaje interior al corazón de los sistemas familiares
Imágenes: Netflix
Explicación de la serie Mi otra yo
Así que si te preguntabas qué tipo de terapia utilizan en Mi otra yo, ¡aquí tienes la respuesta! «Mi Otra yo» utiliza los recursos y la magia del cine para darnos acceso al mundo, a menudo incomprendido, de las constelaciones familiares. Se trata de una serie imprescindible para quienes buscan comprender los vínculos entre el pasado y el presente, que desean sumergirse en un nuevo paradigma en el que los vínculos inconscientes y las lealtades invisibles están en el origen de nuestros males y de nuestra curación personal. Combina emoción e introspección, ofreciendo una experiencia de visionado inolvidable.
La serie destaca por su exploración íntima de las constelaciones familiares y las heridas del pasado. Creada por una mujer turca, Nuran Evren Şit, «Zeytin Agaci» nos adentra en un conmovedor viaje al corazón de la dinámica familiar y la curación personal con el telón de fondo de los paisajes turcos, añadiendo una magnífica dimensión de belleza visual a esta búsqueda de uno mismo.
La serie sigue el viaje de Sevgi, Ada y Leyla, tres amigas que se reúnen en un pueblo turco cerca del mar para enfrentarse a sus fantasmas personales. Sevgi, enferma de cáncer, busca un tratamiento alternativo, llevando a sus amigas a un viaje que pondrá patas arriba su visión de la vida. Ada, cirujana cartesiana, verá tambalearse sus certezas y tendrá que enfrentarse a los movimientos interrumpidos de su pasado. Leyla, por su parte, ve cómo su familia se desmorona y tiene que enfrentarse a la bancarrota de su marido y a un futuro incierto. A través de Zaman, un misterioso místico moderno, cada una de ellas descubrirá un método terapéutico innovador, provocador y eficaz, basado en las constelaciones familiares sistémicas traídas a Occidente por Bert Hellinger, psicoterapeuta y padre de las constelaciones modernas.
Este enfoque, que profundiza en los patrones transgeneracionales y en las memorias corporales, está demostrando ser un catalizador de profundas transformaciones en los personajes, al ofrecerles la oportunidad de resignificar lo que en la visión sistémica se denomina los 3 Órdenes del Amor: Jerarquía, Pertenencia y Equilibrio (véase el artículo Constelaciones familiares: un viaje interior al corazón de los sistemas familiares) : Cuando uno de estos órdenes naturales se desequilibra, empiezan los problemas: falta de dinero, falta de autoestima, enfermedades diversas como agotamiento, depresión, enfermedades autoinmunes, adicción al alcohol, al juego, a la comida, falta de armonía en las relaciones íntimas o profesionales, conflictos familiares y exclusión… todas son señales de alarma que intentan avisar de que algo o alguien está fuera de lugar, ha sido excluido u olvidado, o de que el equilibrio entre dar y recibir se ha visto comprometido.
«El Espíritu busca y es el Corazón el que encuentra».
Georges Sand
Mi otra yo: ¿ficción o realidad?
Pasemos de la ficción a la realidad. En la serie, varias experiencias de los antepasados de cada uno de los personajes principales saldrán a la luz durante las sesiones de constelaciones familiares. Descubriremos cómo sus experiencias siguen siendo relevantes hoy en día y perviven a través de los cuerpos y las vidas de sus descendientes. La serie presenta las constelaciones familiares en forma de sesiones presenciales y de grupo (existen muchas otras técnicas, como el uso de objetos de anclaje, mandalas o constelaciones de agua). Guiada por Zaman, la persona que constela aporta un tema para el que busca una solución y elige representantes que se posicionan en el campo energético y expresarán sus sentimientos. Como en la serie, en la vida real los representantes tendrán sentimientos vinculados a las personas o elementos que representan y revelarán así las dinámicas ocultas y los nudos sistémicos que hay que desenredar. A diferencia de la serie, no siempre descubrimos todo lo que ocurrió en la vida de nuestros antepasados. Las constelaciones actúan más sobre los sentimientos que sobre los hechos, aunque a veces se presenten sobre el terreno pruebas de determinados actos (traiciones, violencia, muertes prematuras u ocultas). Este método no pretende revelar historias, sino restablecer lo que se ha roto, interrumpido o ignorado/excluido, y que impide a la persona constelada vivir plenamente, soberana de su destino.
¿Cómo te pueden ayudar las constelaciones familiares?
¿Te has preguntado alguna vez por qué surgen determinadas situaciones en tu vida? ¿Por qué atraes el mismo tipo de persona, relación o bloqueo? Puede que incluso ya hayas identificado ciertos patrones repetitivos, un gran indicador de nudos sistémicos. Las constelaciones y el desarrollo de una conciencia integradora de ti mismo en tu entorno te permitirán aprender las leyes naturales por las que se rigen nuestras relaciones y que debemos respetar si queremos ser capaces de crear nuestro propio destino reconociendo y respetando a todos los que nos precedieron y nos permitieron existir. Incluso en situaciones muy complejas y difíciles en las que se han perpetuado el abuso y la violencia. Aquí hablamos el lenguaje del Alma, donde el contraste entre el Bien y el Mal, la Víctima y el Verdugo, adquiere una dimensión totalmente nueva. Una de las situaciones más comunes y conmovedoras de observar es cuando, por Amor (inconsciente) y a costa de su propio destino, alguien del sistema se pone al servicio del Todo y de Todos para que pueda restablecerse el Amor. Este enfoque es muy difícil de explicar; es una experiencia de los sentidos, corporal, encarnada y espiritual.
Este camino, el de Mi otra yo, es el camino menos transitado, el camino de la reconciliación con nosotros mismos, con los demás y con la Vida tal como ha sido. En la serie sale mucho la imagen del olivo, ya que la finca donde ejerce Zaman esta rodeada de olivos. La expresión ofrecer una rama de olivo significa poner fin a un desacuerdo y el olivo es una ofrenda de paz para iniciar una discusión. Con fama de inmortal, el olivo es un símbolo de paz, longevidad, esperanza, fuerza y confianza. Nos enseña a TOMAR LA FUERZA DE LA VIDA, LO ESENCIAL, que es el objetivo último de la constelación sistémica y del trabajo transgeneracional.
A través de exploraciones utilizando el campo mórfico, el campo de energía creado durante las sesiones de constelaciones, podemos acceder a las raíces de los males actuales, liberando el flujo de Amor entre los diferentes miembros de un sistema, ya sea familiar o profesional. Podemos recuperar partes de nosotros mismos, sentirnos más vivos, apoyados en nuestras y respaldados por todos los que nos precedieron.
«Lo que más me conmovió de esta serie fue la ampliación de mi conciencia de la interconexión entre yo y mis antepasados y cómo sus experiencias interfieren en mi realidad actual. Ahora estoy muy agradecido a los que vinieron antes mía. Mi experiencia personal con las constelaciones me ha permitido reconciliarme con personas a las que me costaba mucho incluir en mi corazón. Me di cuenta de que, en cierto modo, dejar de juzgarlas era dejar de juzgarme a mí mismo y aceptar lo que había sido. Es un recurso extraordinario para el autodesarrollo y la limpieza personal».
Jack
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Redescubre el equilibrio: encuentra la armonía entre dar y recibir en tus relaciones.
Reintegra simbólicamente a los miembros olvidados: restablece el equilibrio reconociendo a los miembros excluidos de tu sistema familiar.
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